Amo el trigo y la lluvia,
el maíz y las flores,
el agua fresca del manantial,
la sonrisa en el hombre.
A los niños envueltos,
A los niños envueltos,
en caramelos y golosinas,
cuando ríen y juegan
en todo momento
en todo momento
A la gente sencilla
de mis pueblos de América,
la canción combativa,
cada letra que escribo
Tu libertad y la mía,
la razón espiritual de los dos,
la razón espiritual de los dos,
los viejos pedazos de esquemas,
de cada paradigmas que rasgo
Amo los imprevistos sencillos,
la calma después de la pasión,
aquel beso robado,
las frutas maduras
de la cosecha de amor
las frutas maduras
de la cosecha de amor
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